Las Naciones Unidas han definido la juventud como la edad que va de 15 a 25 años. Sin embargo, una definición puramente cronológica se ha mostrado insuficiente. La juventud es un proceso relacionado con el período de educación en la vida de las personas y su ingreso al Mundo del trabajo .

Pero profundizando aún más la idea de juventud pone acento en los procesos de construcción de la identidad del ser humano y el hombre como genero.

El 12 de agosto es el Día Internacional de la Juventud. La fecha fue proclamada el 17 de diciembre de 1999 por la Asamblea General de las Naciones Unidas, mediante la resolución 54/120 I y por recomendación de la Conferencia Mundial de Ministros de Asuntos de la Juventud (Lisboa, 8 – 12 de agosto de 1998).

“Revolución es sentido del momento histórico; es cambiar todo lo que debe ser cambiado…;
es emanciparnos por nosotros mismos y con nuestros propios esfuerzos…; es defender
valores en los que se cree al precio de cualquier sacrificio…; es no mentir jamás ni violar
principios éticos; es convicción profunda de que no existe fuerza en el mundo capaz de
aplastar la fuerza de la verdad y de las ideas…, es luchar por nuestros sueños de justicia
para Cuba y para el mundo, que es la base de nuestro patriotismo, nuestro socialismo y
nuestro internacionalismo”.

Fidel Castro
1 de mayo de 2000.

He querido recrear esta idea como un hecho sintomático en grande, de lo que esta sucediendo y de lo que queremos que suceda en toda la patria, en todas las comunidades. Hay indudablemente dentro de cada grupo social un conflicto generacional, provocado y capitaneado por los jóvenes, aunque no incluye a estos exclusivamente. Seria una falsa métrica conceptual la que pretenda determinar una generación por la edad.

Una generación es una amalgama de individuos de marcada variedad de edades, y a la vez similares en
pensamiento y propósito. Esta compuesta más bien de gente que coincide en la manera de ver un problema y en sus propuestas soluciones, pero no seamos sectarios, una generación no es una elite de cerrazón y exclusivismos. Una generación de responsables esta compuesta de paladines que se encargan de captar la sensibilidad vital de un momento histórico y de transmitirla a la muchedumbre receptiva, hasta concientizarla, para que los propósitos se concreticen en una acción positiva y verdaderamente creadora.

Eso en cuanto a las generaciones. En lo que se refiere al conflicto, este se produce en el instante mismo en el que hay una transmutación de valores y se origina una crisis. Es más bien cuestión de cosmovisión, esto es la perspectiva total de un problema. Un conflicto es un choque de cosmovisiones. Porque en todas las eras hay épocas de carácter acumulativo y hay otras de actitud beligerante. A nadie se le oculta que el mundo de hoy vive esta última y todo esta determinado por la protesta que produce la transición y el cambio.

Una nueva generación es para una nueva época el instrumento, con que obra la naciente sociedad para manifestar el carácter dinámico y verdaderamente revolucionario de una nueva verdad revelada. El mundo se renueva por medio de las generaciones inconformes, que simbolizan el sentido de una naciente y pujante necesidad de crear. Y de este modo la sociedad se remoza cuando algunos de sus hijos en especial los mas jóvenes, reinterpretan su misión, su mensaje y su estructura, que es como recrear la voluntad dinámica que ejerce la verdad, toda ves que ha llegado el momento irreductible…de cambiar todo lo que deba ser cambiado… . El conflicto generacional surge entonces cuando la nueva generación se resiste a ser absorbida por la que va pasando, ya que esta se considera a si misma como la representación incuestionable de toda ley, de todo orden.

El error está en insistir en que los jóvenes, y los que les siguen, no tienen derecho de cuestionar el status quo de la estructura. No se dan cuenta de que para los jóvenes a la hora de protestar y de enjuiciar, no hay nada sacrosanto ni intocable. Claro esta que en este accionar los jóvenes cometen innumerables errores y desaciertos formales. En ellos es entendible. Lo que no es entendible es la actitud de soberbia paternalista que asume la generación vieja, que se hace más arrogante cuanto mas débil se siente. Los jóvenes tienen una percepción sutilísima para darse cuenta de cuando lo estructural se convierte en eje en torno al cual giran todos los intereses políticos, además no le temen a nadie, por muy revestido de autoridad que este. (No tienen nada que perder, y esta es una característica distintiva del grupo). Y si las jerarquías se obstinan en no escucharles, la condición del poder se hace morbosa, porque se da al traste con la dinámica histórica y la estructura se convierte en esclava de si misma.

La necesidad de una constante reevaluación debe ser sobreentendida por la generación vieja. Al final de la jornada, ambas, cada una a su hora, pasara, dejando tras de si un saldo positivo o negativo. El desafío del mundo de hoy se esta expresando por la cólera creciente de una generación que cuestiona el paternalismo, el tradicionalismo, el institucionalismo. En otras palabras, el colonialismo ideo-céntrico. La autoridad jerárquica esta en crisis. Solo se resuelve el conflicto generacional cuando la generación vieja no exija ser tratada de USTED, en medio de genuflexiones acatadoras, mientras que ella trata de TU a la que desean interpelar, y
pretende silenciar las voces de renovación. El respeto al derecho ajeno es la paz.

L.P:. Javier Alvarez Rodríguez